miércoles, 4 de febrero de 2009

Hey there Delilah!

Oh, Dios. Qué alegría cuando todo vuelve a la normalidad. O qué asco, según se mire. ¿Por qué nunca estamos contentos con lo que tenemos? Yo misma me asombro de lo que me gusta quejarme a veces. Yo creo que es porque el no estar conforme con algo te lleva a discutit, y el discutir te da ''vidilla''. En resumidas cuentas, todos necesitamos alguien con quien discutir, porque si no nos rallaríamos mazo. En abril cumpliré los 16, a ver si se me quita algo de este comportamiento típicamente adolescente. Aún así, me gustaría quedarme con los sweet sixteen eternamente. Crecer me aterra. Más indepencia, más responsabilidades, más preocupaciones. En fin, que estoy en exámenes y no me apetece escribir más.

Cuenta atrás : 50 días

1 comentario:

  1. Siempre añoramos aquello que perdimos y deseamos aquello que no tenemos. Es importante aprender a disfrutar de lo que se tiene día a día y no amargarnos de forma estúpida.

    De todos modos, no te preocupes ni tengas mieda por madurar. Es algo natural que vamos consiguiendo sin darnos cuenta, y somos nosotros mismos quienes acabamos siendo conscientes de nuestras responsabilidades. Pero también de nuestras nuevas libertades. Es algo que va unido y que acaba viniendo solo.

    Ánimo ;).

    ResponderEliminar